Hasta que no eres adulto no descubres que frágil puede llegar a ser la figura del padre. ¡Vaya! ¿No se supone que teníamos que ser todopoderosos? ¿Como lo hago si, a veces, me siento tan inestable? ¿Sólo me pasa a mí? Ostras, me siento fatal, he tenido un golpe de genio y les he hecho pagar a los niños.
Cada vez que hagas algo con tus hijos y a continuación te digas «no lo debería haber hecho», te recomiendo fervientemente que inmediatamente pidas clemencia al juez (TU), porque me he dado cuenta de que, de largo, tiene peores consecuencias un buen rato de arrepentimientos en la que nos desvivimos para compensar el daño que hemos hecho que el motivo de todo.
¿Si primero me regañas sin motivo y luego me premias porque si, que tengo que interpretar?
Los padres no somos perfectos, afortunadamente. Explícale brevemente que no es culpa suya y punto.
Ellos también nos quieren infinitamente.
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